El presidente de la Asociación Cruceña de Fútbol, Pablo Salomón, está sentado frente al juez quinto de Instrucción en lo Penal, Roberto Valdivieso, en su audiencia de medidas cautelares. El Ministerio Público pidió, en la imputación formal, que el dirigente guarde detención preventiva en una cárcel; por el tema de territorialidad sería Palmasola. Salomón es acusado por supuesta corrupción en el manejo del balompié nacional.
Al promediar las 8:25 de este viernes, se instaló la audiencia cautelar de Salomón en el juzgado Quinto de Instrucción en lo Penal, de Sucre. Como ya se hizo con los anteriores cuatro acusados, la comparecencia fue declarada en reserva. Los medios aguardan la información afuera de la sala. El magistrado resolverá si se defiende en libertad o lo tendrá que hacer tras las rejas, como tres de los cuatro integrantes de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) que fueron cautelados.
El miércoles, el dirigente fue aprehendido en la Fuerza de Lucha Contra el Crimen (Felcc), tras declarar, por segunda vez, en la fiscalía de la capital del Estado. Ayer amplió su declaración en las mismas instalaciones ante la Comisión de Fiscales, a la cabeza de Iván Montellano.
Salomón es acusado de cometer los presuntos delitos de organización criminal, legitimación de ganancias ilícitas, uso indebido de influencias, beneficios en razón del cargo, delitos tributarios y estafa con la agravante de víctimas múltiples.
La semana pasada, el mismo Valdivieso ordenó la detención preventiva de Chávez (presidente de la FBF), Jorge Justiniano (presidente de la ANF) y Pedro Zambrano (secretario general de la FBF). Además, dispuso que el secretario ejecutivo, Alberto Lozada, guarde arresto domiciliario. Todos imputados por los mismos cargos.
