El estratega argentino se terminó por convencer después de la práctica del lunes, donde probó a los tres porteros en las jugadas de balón parado y tuvo una buena respuesta por parte de los sobre todo de Carlos Lampe y Guillermo Viscarra, que descolgaron los centros con mayor facilidad que el atigrado.
“Nosotros nos sacamos la bronca y la impotencia que significó la derrota con Venezuela. El apoyo de la gente será importante para conseguir los tres puntos y darle una alegría al país”, manifestó el meta aurinegro, que volverá a ponerse los guantes para dar la seguridad a la última del equipo nacional.
