El partido entre el Real Madrid y el Barcelona, de la novena jornada de Liga que se jugará en el Bernabéu el último fin de semana de octubre (25-26), coincide en el tiempo con la conclusión de la sanción impuesta por la FIFA al delantero barcelonista Luis Suárez.
El calendario ha sido caprichoso en este sentido. La FIFA suspendió a Suárez con cuatro meses de inactividad deportiva y la misma concluye el 26 de octubre, por lo que si el clásico se jugara, por ejemplo, el sábado 25, Suárez no podría jugar.
En total, el uruguayo se perdería ocho partidos de Liga y tres partidos de la ‘Champions’. Eso en teoría, porque el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), órgano al que ha recurrido el club catalán y la Federación Uruguaya de Fútbol, ha admitido un procedimiento exprés del caso y a mediados de agosto se podría conocer el veredicto y si aplican medidas cautelares.